martes, 27 de mayo de 2008
Test
Nuevas partituras mozartianas
Concretamente se encuetran en el monasterio de este convento, llamado Jasna Góra ("monte claro"), cuya turbulenta historia comienza en el siglo XIV con la llegada de los monjes paulinos de Hungría. El ejército ruso se asentó en sus fortificaciones en el siglo XVIII, después por las tropas de Napoleón. Más tarde el Zar Nicolás ordenó la reconstrucción de las paredes demolidas como demostración de tolerancia a la iglesia católica, aunque posteriormente Rusia Prusia y Austria temían a Jasna Góra calificándola de revolucionaria y muchos de sus monjes fueron encerrados en Siberia. Un siglo después, las tropas nazis se quedarían en una parte del monasterio aunque al mismo tiempo el recinto había resultado refugio para jóvenes judíos y prisioneros.
Según el cálculo efectuado por Josef Heinz Eibl, publicado en "Mozart. Chronik eines Lebens" (Mozart. Crónica de una vida), 1965, de los treinta y cinco años, diez meses y nueve días de su vida, Mozart pasó diez años, dos meses y ocho días viajando. Pero que yo sepa, en ningún momento pasó por este lugar, así que quién sabe cómo llegaron hasta aquí las misteriosas partituras.
La noticia es muy reciente. Habrá que esperar para saber más sobre esta historia. A saber cuánto tiempo han permanecido escondidas en este convento, lugar de peregrinación para muchos católicos peregrinos cada año. El monasterio alberga más de tres mil obras musicales y está considerado una de los grandes colecciones de Europa.
jueves, 22 de mayo de 2008
Wagner y Nietzsche
Cuando conoció a la avasallante personalidad de Richard Wagner, en noviembre de 1868, lo admiraba y lo elogiaba, de ahí su profunda amistad basada en la admiración. El jóven filósofo tenía 25 años mientras que Wagner tenía la misma edad de su padre. A Wagner, cuya música será escogida por el Tercer Reich como representación de la grandeza alemana, le venía muy bien que Nietzsche, que ya era profesor de filosofía en la Universidad, le elogiara, hasta el punto que escribiera un libro con un prólogo dedicado a él ( en "El nacimiento de la tragedia"); pero cuando ya no lo necesitó, éste criticó sus pequeñas obras musicales y Nietzsche por su parte ajustó cuentas en su contra publicando sus ataques a Wagner, y así, se enemistaron.
Fué con la representación de obras como "el anillo del Nibelungo" la trilogía operística de Wagner, cuando la percepción de Nietzsche versus Wagner cambió drásticamente, ya que cambiaron sus ideologías, y hasta escribió…
Ya en el verano de 1876, a mediados de temporada de los primeros Festivales, tuvo lugar dentro de mí una despedida de Wagner. No soporto nada equívoco; desde que Wagner estuvo en Alemania, condescendió paso a paso con todo lo que yo desprecio — incluso con el antisemitismo... Fue entonces, en efecto, el momento cumbre para la despedida: pronto obtuve la prueba de ello. Richard Wagner, en apariencia el máximo triunfador, en realidad un podrido y desesperado décadent, se postró de improviso, desamparado y abatido, ante la cruz cristiana... ¿No tuvo entonces, pues, ningún alemán ojos en la cara ni compasión en su conciencia para ese horrible espectáculo? ¿Fuí yo el único que sufrió por ello? — en suma, el inesperado suceso arrojó sobre mí un relámpago de claridad sobre el lugar que acababa de abandonar — y también ese estremecimiento posterior que siente el que ha corrido inconscientemente un enorme peligro. Cuando proseguí en solitario mi camino, temblaba; no mucho después caí enfermo, más que enfermo, cansado,cansado de la insoportable desilusión ante todo lo que aún sigue entusiasmándonos a nosotros, hombres modernos, ante la fuerza, el trabajo, la esperanza, la juventud, el amor dilapidados por todas partes, cansado de la náusea ante toda la mentira idealista y el debilitamiento de la conciencia, que de nuevo habían logrado ahí la victoria sobre uno de los más valientes, cansado, en fin, y no fue esto lo de menos, de la tristeza de una implacable sospecha — la de que de ahora en adelante estaba condenado a desconfiar más profundamente, a despreciar más profrundamente, a estar más profundamente solo que antes. Pues no he tenido nunca a nadie como Richard Wagner... Siempre estuve condenado a tener alemanes. (Nietzsche contra Wagner, Friederich Nietzsche).
…rompiendo con una amistad que parecía inquebrantable.
Wagner era un tipo que había criticado a sus contemporáneos, admiró a Beethoven y al resto de los muertos pero se enemistó con los vivos, sólo amaba a Cosima, hija de Franz Lizst, que encima ya estaba casada cuando tuvo un hijo de él, y para la época podréis imaginar el escándalo. Pero fuera de las controversias que existen hacia su persona, se reconoce en su música un valor inmenso en el marco de los más grandes compositores: Amplió la orquesta hasta una sonoridad que ha perdurado hasta ahora, y sus óperas, que pasó a llamar "dramas musicales" son inigualables, llegando a construir su propio teatro a propósito para interpretarlas; La música de Wagner, su tensión, su leitmotiv, su amplitud de temas y su manejo orquestal aún mantenían al pobre Nietzsche al borde de su asiento.
Lo mismo que su música se estableciera como ejemplo de la cultura Alemana junto al legado de Beethoven, a Nietzsche le ha ocurrido algo parecido con su obra, cuando sus teorías fueron mal interpretadas con fines políticos, en la alemania nazi. Aunque Wagner, Cosima y Nietzsche habían compartido ideas y proyectos, y pensamientos racistas parecidos, el filósofo había criticado más tarde el antisemitismo de Wagner como hemos visto en el texto anterior. Nietzsche rompía con ellos, con Shopenhauer, y con el romanticismo en general en sus obras posteriores, una vez habían madurado sus ideas, y escribió "El caso Wagner" y "Nietzsche contra Wagner", publicado cuando el compositor por entonces ya había fallecido. En respuesta, el biógrafo del maestro acusó a Nietzsche de celos por su frustrada aspiración a músico en un libro titulado "El caso Nietzsche, un problema psicológico" aunque disparataba con la historia de una ópera del filósofo criticada por Wagner que nunca existió...
Richard Wagner murió aclamándose como un genio musical y ejemplar de la música romántica, y Cosima dedicaría el resto de sus días a difundir su obra. Nietzsche moría años más tarde, aturdido por la locura y la parálisis, cuando el único estímulo que lo hacía reaccionar era la música.
Al fin y al cabo, siempre tuvieron algo en común.
http://www.nietzscheana.com.ar/musica.htm
sábado, 17 de mayo de 2008
Arabesque 1
Claude Debussy (1862-1918) fue un autor que llevó a la música las inquietudes estéticas de sus compañeros pintores de la época, de los impresionistas, de modo que, aunque no baste esta metáfora para describir su obra, sus páginas se llenaron de pequeñas pinceladas de color y sensaciones exóticas, dulces y, a veces, perturbadoras, recurriendo a la belleza del sonido por sí mismo. Está considerado el precursor de la música contemporánea.
Ésta pieza (de las Deux Arabesques) fue compuesta durante su juventud. Estudiaba en el conservatorio de París, aunque después de que le otorgaran un premio tuvo la oportunidad de ir a estudiar a Roma. Recibió influencia de sus contemporáneos pero no solamente compositores, sino también pintores, escultores, literatos. Puso música a varios poetas.
De su estilo impresionista, la obra más impresionante y reconocida es el tríptico sinfónico La mer ("El Mar", personalmente recomiendo sobre todo el tercer movimiento, "diálogo entre el mar y el viento", increíble cómo la orquesta representa a la perfección este título). Rompe con la estética clásico-romántica de su tiempo creando un estilo más nuevo, libre, oscilante y abierto a otras posibilidades.
viernes, 16 de mayo de 2008
¿Qué le pasa al planeta?
Esta semana las noticias han sido terribles. Unas por culpa de los humanos mismos y otras por la naturaleza. Me ha recordado el tema de un libro cuyo argumento trata de lo siguiente: La Naturaleza decide actuar (por naturaleza) y ataca al ser humano hasta conseguir su completa destrucción y extinción... Considerando cierta la frase que decía el malo de Matrix, que los humanos somos el cáncer del planeta, sería lo más "natural" del mundo que la propia naturaleza acabara con nosotros.
domingo, 11 de mayo de 2008
Pandémica y celeste
muy tarde ya en la noche
hablemos hombre a hombre, finalmente.
Imagínatelo,
en una de esas noches memorables
de rara comunión, con la botella
medio vacía, los ceniceros sucios,
y después de agotado el tema de la vida.
Que te voy a enseñar un corazón,
un corazón infiel, desnudo de cintura para abajo,
hipócrita lector -mon semblable, -mon frère!
Porque no es la impaciencia del buscador de orgasmo
quien me tira del cuerpo a otros cuerpos
a ser posiblemente jóvenes:
yo persigo también el dulce amor,
el tierno amor para dormir al lado
y que alegre mi cama al despertarse,
cercano como un pájaro.
¡Si yo no puedo desnudarme nunca,
si jamás he podido entrar en unos brazos
sin sentir -aunque sea nada más que un momento-
igual deslumbramiento que a los veinte años!
Para saber de amor, para aprenderle,
haber estado solo es necesario.
Y es necesario en cuatrocientas noches
-con cuatrocientos cuerpos diferentes-
haber hecho el amor.
Que sus misterios,como dijo el poeta, son del alma,
pero un cuerpo es el libro en que se leen.
Y por eso me alegro de haberme revolcado
sobre la arena gruesa, los dos medio vestidos,
mientras buscaba ese tendón del hombro.
Me conmueve el recuerdo de tantas ocasiones...
Aquella carretera de montaña
y los bien empleados abrazos furtivos
y el instante indefenso, de pie, tras el frenazo,
pegados a la tapia, cegados por las luces.
O aquel atardecer cerca del río desnudos y riéndonos, de yedra coronados.
O aquel portal en Roma -en vía del Balbuino.
Y recuerdos de caras y ciudades
apenas conocidas, de cuerpos entrevistos,
de escaleras sin luz, de camarotes,
de bares, de pasajes desiertos, de prostíbulos,
y de infinitas casetas de baños, de fosos de un castillo.
Recuerdos de vosotras, sobre todo,
oh noches en hoteles de una noche,
definitivas noches en pensiones sórdidas,
en cuartos recién fríos,
noches que devolvéis a vuestros huéspedes
un olvidado sabor a sí mismos!
La historia en cuerpo y alma, como una imagen rota,
de la langueur goûtée à ce mal d'être deux.
Sin despreciar
-alegres como fiesta entre semana-
las experiencias de promiscuidad.
Aunque sepa que nada me valdrían
trabajos de amor disperso
si no existiese el verdadero amor.
Mi amor,
íntegra imagen de mi vida,
sol de las noches mismas que le robo.
Su juventud, la mía,
-música de mi fondo-
sonríe aún en la imprecisa gracia
de cada cuerpo joven,
en cada encuentro anónimo,
iluminándolo. Dándole un alma.
Y no hay muslos hermosos
que no me hagan pensar en sus hermosos muslos
cuando nos conocimos, antes de ir a la cama.
Ni pasión de una noche de dormida
que pueda compararla
con la pasión que da el conocimiento,
los años de experiencia de nuestro amor.
Porque en amor también es importante el tiempo,
y dulce, de algún modo,verificar con mano melancólica
su perceptible paso por un cuerpo
-mientras que basta un gesto familiar en los labios,
o la ligera palpitación de un miembro,
para hacerme sentir la maravilla de aquella gracia antigua,
fugaz como un reflejo.
Sobre su piel borrosa,
cuando pasen más años y al final estemos,
quiero aplastar los labios invocándola imagen de su cuerpo
y de todos los cuerpos que una vez amé
aunque fuese un instante, deshechos por el tiempo.
Para pedir la fuerza de poder vivir
sin belleza, sin fuerza y sin deseo,
mientras seguimos juntos
hasta morir en paz, los dos,
como dicen que mueren los que han amado mucho.
Jaime Gil de Biedma
sábado, 10 de mayo de 2008
Oda a la Alegría en Re menor
¡Oh amigos, no con esos acentos!
¡Entonemos cantos placenterosy plenos de alegría!
¡Alegría, hermosa chispa de los dioses,hija del Elíseo!
¡Ebrios de ardor penetramos,diosa celeste, en tu santuario!
Tu hechizo vuelve a unirlo que el mundo había separado,
todos los hombres se vuelven hermanos
allí donde se posa tu ala suave".
Beethoven ya estaba completamente sordo entonces. Subió al estrado para recoger sus partituras cuando terminó la obra, triste debían ser sus gestos cuando ya había asumido angustiado que no podía oír, y en consecuencia de no poder dirigir a los músicos durante la interpretación. No había escuchado absolutamente nada de lo que había escrito, pero estaba en su cabeza. Muchos compositores y músicos todavía se preguntan sorprendidos si es esto posible. Una solista avisó al maestro para que se diera la vuelta y así ver que todo el teatro estaba en pie elogiándolo con fuertes aplausos por lo que había creado.
Inmortal Beloved (1994), Directed by Bernard Rose. With Gary Oldman, Jeroen Krabbé, Isabella Rossellini. Para mí esta película retrata a Beethoven de manera espectacular.
miércoles, 7 de mayo de 2008
A Baltasar lo convencía el dibujo, no precisaba explicaciones, por la simple razón de que no viendo nosotros el ave por dentro, no sabemos qué es lo que la hace volar, y sin embargo vuela, porque, teniendo forma de ave, no hay nada más simple, Cuándo, se limitó a preguntar, No lo sé aún, respondió el cura, me falta quien me ayude, solo no puedo hacerlo, y hay trabajos para los que no basta mi fuerza. Se calló otra vez, y luego, Quieres venir tú a ayudarme, preguntó. Baltasar dio un paso atrás, estupefacto, -Yo no sé nada, soy un hombre del campo, aparte de eso sólo me enseñaron a matar, y así, tal como estoy, sin esta mano, -Con esa mano y ese gancho puedes hacer lo que quieras, y hay cosas que hace mejor un gancho que la mano entera, un gancho no siente dolor si tiene que tirar de un alambre o sostener un hierro, ni se corta ni te quema, y te digo que manco es Dios e hizo el universo.
Balatasar retrocedió asustado, se santiguó a toda prisa, como para no dar tiempo al diablo a concluir su obra, Qué está diciendo, padre Bartolomeu Lourenço, dónde está escrito que Dios sea manco, Nadie lo ha escrito, no está escrito, pero yo digo que Dios no tiene mano izquierda porque es a su diestra, a su mano derecha donde se sientan los elegidos, no se habla nunca de la mano izquierda de Dios, ni las Sagradas Escrituras, ni los Doctores de la Iglesia, a la izquierda de Dios no se sienta nadie, es el vacío, la nada, la ausencia, luego Dios es manco. Respiró hondo el cura y concluyó, De la mano izquierda.
Memorial del convento
José Saramago.
En algún momento me distraje, me caí del mundo, y ahora no sé por dónde se entra.
to adagio sostenuto's blogsite.
A little bit of music and other skills.